Buscan igualar condiciones tecnologicas con los Estados Unidos

México acelera la implementación del estándar IBOC para frenar invasión espectral

Frente a la invasión espectral de radiodifusores estadounidenses en la porción que le corresponde al Estado mexicano, la Comisión Federal de Telcomunicaciones (Cofetel) decidió defender a los concesionarios y preservar el derecho de uso del espectro adjudicado y asignado a México en los acuerdos bilaterales en la materia, según informó el diario Crónica de ese país.
El ente de control convocó a los concesionarios para que de manera voluntaria decidan iniciar transmisiones con el sistema digital IBOC (In Band on Channel) para que utilicen ese estándar y les ofreció facilidades para modificar las características técnicas de sus estaciones.
La Cofetel está realizando una consulta pública nacional para la definición del estándar de radio digital que se usará en el país, que concluye el 11 de mayo próximo.
La industria radiofónica mexicana tiene que decidir si será la IBOC, la Eureka o la Digital Radio Mundiale.
Los radiodifusores que empiecen transmisiones con el IBOC deberán mantener la continuidad del servicio analógico y presentar reportes trimestrales del funcionamiento de sus estaciones.
El inicio de operaciones de radio digital en la frontera norte, con el estándar IBOC, tiene el objetivo de igualar las condiciones tecnológicas de las estaciones mexicanas que operan en la frontera norte con las emisoras estadounidenses que ya emplean el sistema IBOC para sus transmisiones.
Hasta ahora las radiodifusoras mexicanas han sido afectadas por las señales de sus homólogos estadounidenses. Con la utilización del sistema IBOC los concesionarios y permisionarios de radiodifusión sonora también contribuirán a la realización de los trabajos de investigación y desarrollo del Comité Consultivo de Tecnologías Digitales para la Radiodifusión, con el propósito de establecer criterios técnicos para la planificación de las tecnologías de radio digital.

Saul Martinez

Apareció asesinado el periodista mexicano secuestrado

Una semana después de su secuestro apareció muerto el periodista mexicano Saúl Martínez de 36 años.
El trabajador de prensa había sido raptado el 16 de abril en el Estado de Sonora, delante de los locales de la dirección de la Seguridad Pública municipal, según el diario Nuevo Día de México.
La víctima era el editor del diario de Agua Prieta. Saúl Martínez mantenía contactos con un antiguo policía municipal de la localidad, Angel Borboa, quien también fue secuestrado el pasado 13 de marzo.
Aunque no se ha establecido el móvil del secuestro y asesinato del periodista, los investigadores creen que fue obra de bandas del narcotráfico, según indicó la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF).
En lo que va del año ya son dos los reporteros asesinados este año en México, informa hoy la prensa mexicana.
Martínez fue identificado el lunes pasado por sus familiares por un tatuaje que tenía en el hombro derecho con el nombre de su hijo mayor. El cuerpo estaba descompuesto y quemado por el sol.
Según las autoridades, llevaba unos seis días muerto, lo que significaría que fue asesinado unos dos días después de su secuestro.
Martínez Ortega se convierte en el periodista número 11 en ser asesinado en México en los últimos 15 meses. El 6 de abril fue ultimado a tiros el corresponsal de “Televisa” en Acapulco, Amado Ramírez.
Según la organización RSF, México es uno de los países del mundo más peligroso para el ejercicio de la actividad periodística, debido a las amenazas del crimen organizado.
RSF señala que la campaña antidroga emprendida por las autoridades federales genera severas represalias por parte de los narcotraficantes. Los periodistas están cada vez más expuestos a este clima de violencia, y en algunos Estados podemos temernos una neta degradación en la situación de la libertad de prensa.

Los empresarios se oponen

Rigen nuevas tarifas por derechos de autor discográficos en Panamá

Desde el 30 de abril están en vigencia las nuevas tarifas por utilización de música o productos fonográficos que deben pagar televisoras, radios, bares, ferias, cantinas, pubs, y otros establecimientos y empresas en Panamá, según informó el diario La Prensa de ese país.
Los montos, que fueron aprobadas por el Ministerio de Educación el 2 de enero de 2007, serán aplicadas por la Sociedad Panameña de Productores Fonográficos (Produce).
Una televisora deberá pagar 2% de sus ingresos brutos; una emisora, 2.5% sobre los ingresos de publicidad; una discoteca móvil, entre 20 y 250 dólares por actividad; un bus de turismo, cinco dólares por cada salida; y una máquina tragamoneda musical, 30 dólares, entre otros.
“Después de estar contemplado en la ley desde hace más de 10 años, hasta ahora se efectuará el cobro por el producto de las compañías discográficas”, dijo José Miguel González, presidente de Produce.
Esta sociedad representa un catálogo de más de 4 millones de fonogramas, pertenecientes a productores discográficos locales y empresas transnacionales como Sony-Bmg, Warner Music, Emi y Universal Music.
La noticia no fue bien recibidas por las empresas, cuyos representantes están evaluando cómo librarse del pago.
“Queremos hacer todas las gestiones porque no estamos dispuestos a afrontar este cobro, que es como un nuevo impuesto que se nos aplica”, señaló Ricardo Bustamante, presidente de la Asociación Panameña de Radiodifusión.
“Vamos a verificar si ellos están autorizados a recaudar las tarifas y vamos a sentarnos a negociar con ese nuevo organismo de gestión”, advirtió Bustamante.