UNOS SE VAN, OTROS CRECEN El ritmo que han tomado las transacciones entre grupos inversores en el área de telecomunicaciones es tan vertiginoso y complicado- que hace envejecer los diarios más rápido que de costumbre. Hace dos meses dábamos cuenta del nuevo balance de fuerzas provocado por la irrupción del Citicorp Equity Investment (CEI) en prácticamente todo el mercado. Desde entonces los rumores se multiplicaron y muchos de ellos se convirtieron en operaciones reales. El resultado es un nuevo mapa de operación, en parte previsto desde entonces, pero que igual depara más de una sorpresa. Era fácil suponer, vista la composición accionaria de los tres MSO líderes, que VCC terminaría fusionándose con Cablevisión. Sin embargo, al término de los nuevos tratos ésta absorberá sólo el 50% de la empresa; la otra mitad será a su vez transferida a Multicanal, repartiéndose de esta manera ambas redes los 700 mil abonados del cable que fundara Samuel Liberman. De esta manera Multicanal llegaría a sumar alrededor de un millón seiscientos mil abonados, contra casi un millón cuatrocientos mil de Cablevisión (si se concretan las previstas absorciones de VCC y la operación argentina del grupo Mandeville). El holding mendocino Supercanal avanza a un distante pero ambicioso tercer lugar, con 600 mil abonados y la posibilidad de quedarse con el sistema satelital TDH. Pero todo es más complicado de lo que parece: todos los MSO están relacionados entre sí, directamente o a través de sus dueños. Este confuso panorama aunque algo más claro que hace unos meses- tiende a la máxima concentración y se condice con el actual período transicional que atraviesan las telecomunicaciones. Ciclos cumplidos Hasta hace poco, los grandes grupos inversores sólo se preocupaban por comprar indiscriminadamente, a fin de acumular capitales y poder. Hoy ya pueden diferenciarse tres segmentos, en vista de las nuevas operaciones: están los pioneros que abandonan el mercado después de vender al mejor postor, los que compraron para después revender, y los verdaderamente interesados en permanecer y competir. Entre los primeros se cuentan los "históricos" Samuel Liberman y Eduardo Eurnekian, fundadores respectivamente de VCC y Cablevisión. Liberman se desprendió de todas sus acciones como operador de cable para pasarse al mercado editorial, donde ya debutó con la revista de actualidad El planeta urbano. Eurnekian retuvo un 7,2% de Cablevisión y mantiene el control en el resto del llamado Multimedios América, que incluye radios, TV abierta y gráfica. Los grupos norteamericanos Mandeville, United International Holdings (UIH) y Tescorp, que en el último año habían absorbido a una buena cantidad de operadores independientes del interior, se retiran después de revender a grupos más grandes con considerables sobreprecios. El norteamericano Mandeville había pagado 870 dólares por abonado en una operación conjunta a fines del año pasado; ahora está a punto de transferir la totalidad a Cablevisión, que pagará no menos de 1.200. UIH y Tescorp este último socio principal de Cabledifusión S.A.- vendieron al holding mendocino Supercanal: se calcula que éste pagará más de 1.300 dólares per cápita por abonados que aquéllos habían comprado en 600 a 900 dólares menos de un año atrás. Un negocio similar hizo UsWest, que vía Continental Cablevision venderá al CEI y Multicanal la parte de VCC que había comprado a Liberman hace pocos meses. Los que siguen en carrera parecen ser los verdaderos interesados en el sector, por lo menos hasta la desregulación de la telefonía en el 2000. Son el Grupo Clarín, que controla el 70% de Multicanal; el CEI y su habitual socio Telefónica de España S.A. (Tisa), que participan de Cablevisión, Multicanal y Torneos y Competencias S.A. (la productora de contenidos más exitosa del país); y el Grupo Uno S.A., también conocido como grupo Vila, que controla el creciente holding mendocino de Supercanal. En una posición intermedia está Tele-Communications International (TCI), el mayor operador de cable en EE UU, que se había anticipado a la nueva ola al comprar Cablevisión en el 95. TCI vendió pero retiene un cuarto de las acciones, así como su parte en Torneos y Competencias y la totalidad de la productora Pramer. Poligamia y misterio El máximo ejecutivo de TCI, Fred Vierra, supo resumir el cambio de actitud de los inversores en una entrevista telefónica que concediera al diario La Nación: "hoy la telefonía básica, la televisión por cable y la programación so negocios diferentes, pero en los próximos diez años esa distinción desaparecerá. La telefonía ofrecerá transmision de datos, videoteléfono, acceso a Internet, televisión y programas". El CEI es por ahora el grupo que adopta la nueva política con mayor diligencia. Hoy participa de los cuatro MSO más importantes, directa o indirectamente; tiene intereses en telefonía y en programación, y es socio de prácticamente todos sus competidores. El otro fenómeno de estas últimas semanas de shopping es el de Supercanal, que en poco tiempo se posicionó como el cuarto operador en importancia (tercero con la prevista desaparición de VCC). No pocos miran con suspicacia este crecimiento, apoyado en créditos de bancos internacionales y dirigido por el ex ministro del interior José Luis Manzano, principal operador de la sociedad que integran el grupo mendocino Vila y Mastec, empresa del exiliado cubano Jorge Mas Canosa. Cuando Mastec vino a instalarse en la Argentina, su representante era Adelina Dalesio de Viola, quien todavía hace negocios para el cubano. Tanto Manzano como Viola estuvieron sospechados de corrupción a su paso por el gobierno nacional; en los próximos días el periodista Carlos Suárez publicará un libro sobre los contactos mafiosos de Mas Canosa en Miami, su lugar de residencia. El Grupo Clarín, por último, se consolida con el mayor MSO de la Argentina (casi un tercio del total de abonados), aunque en el futuro tendrá que pelear duro para mantener el liderazgo si el CEI y Tisa consolidan su multimedios en formación. CUADRO DE SITUACION TRAS LAS COMPRAS
|
R&TA Radio y Tv Americana
Pte. Luis Saenz Peña 1335, piso 1º of. 6
(1135) Buenos Aires, Argentina.
e-mail: rta@rt-a.com