LEY DE FM
Se abren caminos de rosas y espinas

Hacía más de tres meses que la Ley de Normalización del Espectro de FM estaba en condiciones de ser tratada en la Cámara de Diputados. Sin embargo, por los recientes avatares de la campaña electoral, se demoró el debate en el recinto.

Finalmente, la novedad de la sanción llegó la tardecita del 5 de este mes cuando 160 legisladores levantaron la mano dando el sí por unanimidad. El tratamiento del proyecto de ley fue rápido y su resolución no se hizo esperar, ya que se incluyó en el orden del día por consenso generalizado, sin objeciones ni disidencias. Pero en razón de haberse modificado el artículo 2º de la norma, es que no se puede cantar victoria y, todavía no tenemos Ley de FM. El artículo en cuestión tiene que ver con el funcionamiento de la Comisión Bicameral que en lugar de tener su sede en Senadores –que había quedado como Cámara de origen- estará funcionando en Diputados.

Justamente este "cambio de domicilio" obliga a que la norma sancionada por diputados vuelva a la Cámara de Senadores.

¿Habrá este año ley para las FM? Dificil. De aquí en adelante hay dos posibilidades para que sea tratada: o se incluye en el Orden del Día antes que finalicen las sesiones ordinarias –esto es, el 30 de este mes- o se trata en extraordinarias. Pero para que esto se haga efectivo, el presidente Carlos Menem debe pedirlo, lo que parece poco probable. Entonces sí habrá que armarse de paciencia porque Senadores se preocuparía por este tema recién a partir de marzo del ’98 (fecha en que se retoman las sesiones ordinarias en la Cámara).

En esas circunstancias, hay dos vías para llevar el proyecto de Ley de FM al recinto: una de ellas es que sea tratado sobre tablas si algún legislador lo solicita. Si dos terceras partes de los presentes está de acuerdo, la Cámara se constituye en comisión. Esto, evidentemente, agilizaría el trámite. El otro camino es seguir con los procedimientos normales, incluyendo el tema en el Orden del Día.

Sin embargo, las cosas pueden complicarse si la Cámara de Senadores insiste en su sanción anterior, previo al cambio que sufrió en Diputados. En este caso, la norma necesitará otra nueva aprobación de los miembros de la Cámara baja. Aunque también cabe la opción que los senadores acepten sin chistar la modificación realizada por Diputados y finalmente tengamos Ley de FM.

La ley marco ingresa al mundo de los sueños

Teniendo en cuenta que las sesiones ordinarias de la Cámara de Diputados finalizan el 30 de noviembre, y el temario de las extraordinarias se basa exclusivamente a pedidos del Poder Ejecutivo, parece bastante difícil que la Ley de Radiodifusión tenga la bendición de tratamiento en lo que resta de este año.

Como se recordará, el proyecto en cuestión -presentado por el diputado justicialista Juan Manuel Valcárcel- tuvo dictamen de mayoría y de minoría. La norma presentada por la oposición llevaba la firma de la diputada frepasista Irma Parentella.

Pero esta vez los tiempos corren en contra, pues la legislatura se renueva el próximo 10 de diciembre, tras la caída del peronismo.

Y este pequeño detalle puede hacer volver todo atrás; el proyecto de ley vuelve a la línea de largada y desanda todo el camino recorrido hasta ahora.

La explicación para que esto ocurra es muy sencilla: el artículo 111 del Reglamento que determina los plazos y la forma de presentación y tratamiento de leyes, dice que "los despachos formulados por las Comisiones de que se haya dado cuenta a la Cámara, se mantendrán en vigor mientras no se retiren o modifiquen en la forma prevista por este Reglamento, hasta la renovación ordinaria de los miembros de las Comisiones...". En pocas palabras: al renovarse la Cámara de Diputados, los proyectos que no hayan sido tratados con anterioridad a ese cambio vuelven a ser tratados en Comisión; deben tener dictamen de mayoría y minoría y ser incluidos en el Orden del día para ser tratados en el recinto (siempre que exista la voluntad política de hacerlo, claro está). Recién entoces –tras ser aprobada en esa cámara- iría a Senadores, donde tendría dos años de plazo para tener tratamiento.

Quiere decir que, con mucha suerte, nuestro país podría tener una nueva ley de radiodifusión –que reemplace a la 22.285/80- de aquí a tres años. Y aunque para Carlos Gardel, veinte años no es nada, para los argentinos diecisiete años –desde 1983 hasta el 2000- es mucho.