Presencia de ARCA

El 2º Congreso de Comunicadores Católicos de Rosario espera reunir una cantidad de asistentes similar al primero realizado en Mar del Plata, en que uno de cada cuatro inscriptos optó por el área radiodifusión.

El crecimiento periodístico tiene que ver con el desarrollo de las radios que se multiplicaron como los panes del evangelio. La oferta en esta área, tal vez sea la más concreta de todo el congreso; por un lado el fervor y entusiasmo de la gente, por otro un serio trabajo supervisado por (ARCA).

Contener las inquietudes de cuatrocientos participantes es un desafío que obliga a ARCA a pensar en una responsabilidad mayor a la que soñaron sus fundadores. Es, además, el producto de una necesidad latente que excede holgadamente la contención de emisoras exclusivamente confesionales.

Es cierto que en la Argentina tardíamente aparecieron las radios católicas, pero también es cierto que su desarrollo fue fecundo y la creatividad de cada uno de sus directores permitió ganar un lugar en el espectro.

Hablar de un modelo de radio católica argentina, tal vez cueste por que cada iniciativa fue un modelo distinto y todas juntas forman un mosaico de alternativas. El Congreso de Rosario permitirá conocer las distintas opciones, y hasta compararlas con otras experiencias. Con ese objetivo están invitados: Javier Sanmartín de Radio Vaticano (la radio del Papa); Javier Soteras de Radio María Argentina (una alternativa espiritual de evangelización explícita); el presbítero Federico Capdepon de Radio Pax Catholic Comunications (una radio católica comercial) de Estados Unidos y el reverendo Cesar Moreira, presidente de la red católica de radio de Brasil (180 radios interconectadas) y director de Radio Aparecida (la radio católica más grande de América latina).

Sin duda que la apertura pretendida por ARCA se encuentra en el mejor momento para instalarse, organizarse y crecer.

Solamente quedará una incógnita, y es como seguirá de aquí en más la relación entre esta entidad y la Comisión de Comunicación Social, ya que monseñor Casaretto en pocos meses tendrá que ceder la presidencia a algún obispo que, en forma anónima, se paseará por los talleres de trabajo en el "Patio de la madera" de Rosario.

Por lo pronto ARCA se prepara tanto para reunir a sus socios como para incorporar sangre nueva en su ámbito. El escuchar propuestas sobre modelos de radios católicas internacionales enriquecerá el trabajo profesional que su presidente lleva adelante en beneficio de una comunicación radial solidaria y comunitaria que lucha por imponerse en las rutinas de sus oyentes.

 Pablo Demkow