En la CNC se hicieron transmisiones de televisión de alta definición con calidad impecable

La Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC), órgano fundamental en el desarrollo de la televisión digital, realizó durante las últimas semanas de este mes demostraciones de lo que serán las transmisiones de esta nueva tecnología.

A estas alturas, es sabido que la televisión digital ya es una realidad en nuestro país. Si bien todavía faltan algunos años para que cada hogar tenga un televisor digital, los canales de TV abierta ya están invirtiendo en tecnología de avanzada y realizando las primeras pruebas de transmisión.

Con la presentación de Roberto Uanini, vicepresidente primero de la CNC, el público citado en el auditorio ubicado en el quinto piso del Correo Central pudo apreciar la calidad impecable de imagen y sonido en una pantalla plana de 64 pulgadas.

Ante todo, Uanini hizo un raconto de cómo se fueron desarrollando los hechos hasta llegar a la elección del estándar americano (ATSC): se reunieron comisiones técnicas que estudiaron las factibilidades y necesidades en la materia y posteriormente se realizó la audiencia pública en la que la mayoría de los disertantes coincidió en adoptar el mencionado estándar.

En cuanto al tiempo que se requerirá para que las televisiones sean accesibles a la mayoría de la población, Uanini estimó que será entre ocho y doce años: "no hay requisitos estipulados desde la CNC en cuanto a plazos, pero el Gobierno decidió que mientras exista un televisor analógico se continuará transmitiendo con los dos sistemas en forma simultánea".

Por otra parte, comentó que en la actualidad, el precio de una pantalla de 32 pulgadas es de 5.000 dólares, pero se espera una caída del 50 por ciento anual. "Sucederá lo mismo que cuando apareció la TV color; llegó un momento en que comprar una blanco y negro y una color costaba lo mismo" acotó el hombre de la CNC.

En tanto, afirmó que "estamos a la vanguardia en América latina; vamos sólo un par de pasos detrás de los Estados Unidos".

La transmisión

Las producciones norteamericanas que se exhibieron en la pantalla de Philips incluyeron avisos publicitarios, fragmentos de películas, de documentales y de programas varios. Seguidamente se realizó la conexión con los estudios de Artear, desde donde se emitió una grabación con partes de los ciclos más renombrados de Canal 13. Mónica Cahen D’Anvers introdujo al público en el material que vería a continuación y fue María Laura Santillán la responsable de poner fin –sólo por ahora- a la transmisión desde la planta ubicada en la calle Lima.

En ambos casos, la diferencia de calidad en imagen y sonido con la televisión analógica es notoria. La nitidez es tan alta que parece como si uno estuviera dentro de la pantalla, o mejor, como si estuviera inmerso en la realidad de lo que sucede a través de ella.

Pero más allá de todo esto, es importante señalar que la ventaja de la TV digital no sólo pasará por lo se pueda ver y escuchar, sino por los servicios que se podrán ofrecer en un futuro. Tal es el caso del pay per view y la interactividad, lo que causará modificaciones en todos los servicios y será el causante del surgimiento de otros tantos.

La interactividad, por ejemplo, permitirá al televidente –vía línea telefónica o cable módem- enviar información de retorno a través de su pantalla. Como consecuencia de ello, podrá acceder a Internet, enviar correo electrónico, hacer las compras del supermercado o home banking.

Las inversiones

El ingeniero Juan Carlos Guidobono, gerente de técnica y operaciones de Artear, también estuvo en la primera transmisión de televisión digital organizada por la CNC.

Respondió a las preguntas que le hicieron los presentes y dio detalles de esta nueva tecnología.

Hablando de números, el ingeniero estimó que para tener un buen equipo de transmisión (móvil de exteriores, diez cámaras, entre otros) se requiere de unos trece millones de dólares.

"En Artear ya invertimos 400.000 dólares y en poco tiempo más vamos a desembolsar una cifra semejante. Pero en total hay en juego alrededor de ocho millones de dólares" contó Guidobono.

Por otro lado, explicó que las cámaras integradas con que cuentan en la actualidad, permiten realizar tanto un upconverter como un downconverter; esto es, se puede subir o bajar la calidad de imagen de una manera ficticia a calidad digital o analógica. Esto permite que por el momento, se graba de forma tal que se pueda seguir transmitiendo como se lo vino haciendo hasta ahora.

Lo cierto es que en pocos años más (en Estados Unidos el plazo máximo estipulado es de ocho años) tanto el equipo de grabación y transmisión como las pantallas de televisión serán completamente digitales. Inclusive se deberán cambiar las videograbadoras, porque las que actualmente están a la venta no sirven para la TV digital.

Guidobono contó que en el país del Norte salió una videograbadora que permite grabar en cinta VHS con calidad digital, pero debieron sacarla del mercado porque violaba los derechos de autor, en tanto podía grabar con la misma transparencia con recibía los datos.