Por qué tarda la 0-800 del Comfer

 

Se trata de una línea gratuita para escuchar a la gente. Hace un mes, Gustavo López dijo que ya estaba casi lista. Pero aún no se firmó un convenio por apoyo técnico y profesional. Y si bien el servicio está avalado por las altas esferas políticas, el dinero aún no llegó.

 

A mediados de julio, el titular del Comité Federal de Radiodifusión, Gustavo López, anunció que “en pocos días más” estaría lista la nueva línea telefónica gratuita 0-800 de atención al público para recibir opiniones, sugerencias y hasta reclamos. Pero a un mes de aquel anunció, aún no se sabe qué pasará con este servicio. Según confirmaron a R & TA fuentes confiables del organismo, “la burocracia del Ministerio de Economía retarda notablemente la llegada de los fondos necesarios para el servicio, a pesar de haber recaudado suficiente. Por lo tanto, si no llega urgente una salvaguarda económica, técnica y profesional, difícilmente pueda implementarse de acá a un mes”. Al parecer, el retraso tiene que ver con un convenio fallido que el organismo estatal debería haber firmado antes de fines de julio para conseguir la asistencia necesaria. Por inconvenientes que el organismo se negó a revelar, el acuerdo aun no tiene fecha establecida y quedó en stand by. Y si bien la implementación de una línea telefónica de este tipo requiere de un plantel de personal especial que el Comfer debe capacitar, hasta el momento no se ha realizado una reorganización administrativa interna capaz de iniciar el servicio. El propio López confirmó que el proyecto también esta “frenado por los obstáculos económicos”. Sólo que por las características del servicio, ya deberían haber sido garantizados de antemano. Esta línea de escucha se enmarca dentro de un proceso de participación ciudadana para promover la apertura del gobierno con los ciudadanos, una política de Estado impulsada desde las más altas esferas del poder político. En un principio esta idea había sido promovida por el vicepresidente Carlos Alvarez a través de la comisión de reforma del Estado y de la famosa Carta del Ciudadano para mejorar la relación con la gente. De ahí surgió la participación del Comfer en este programa y para el cual fue especialmente seleccionado como uno de sus más activos integrantes. Sólo falta que la idea impulsada esté acompañada del sustento monetario para llevarla a buen puerto.

Cómo funcionaría el servicio

Cuando la persona llama, el asistente ubicará el tema y solicitará al usuario el llenado de un cuestionario específico para facilitar la evaluación de la situación y garantizar la orientación adecuada. El sistema estará conformado por alrededor de 10 líneas rotativas especialmente diseñadas para poder satisfacer la demanda de llamados que estiman en aumento luego de las transformaciones iniciadas para solucionar los conflictos en torno a las frecuencias de radios. La confección de estos cuestionarios ya fue encargada una empresa especializada que deberá establecer las diferentes variables para encontrar solución a las demandas de los que llaman. Pero aún el vocero de la entidad no quiere precisar más detalles hasta que no se clarifique el panorama de su implementación demorada. Una vez que el organismo acceda al material como resultado de la llamada, se clasificará de acuerdo con los criterios establecidos y se iniciará un proceso de circulación por las áreas administrativas que entienden en cada caso. Esa información pasará por las manos de fiscalizadores y evaluadores para darle el curso adecuado y satisfacer las necesidades de los ciudadanos.