Medida judicial en favor de FM ALAS

Las actuales autoridades de la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) consumaron un estricto acto de justicia. La CNC reconoció la arbitrariedad que se cometió con el allanamiento de la radio de frecuencia modulada FM Alas, de la localidad rionegrina de El Bolsón, y en razón de ello quedó sin efecto la virtual prohibición de emitir su señal al aire. El allanamiento se había producido el 3 de febrero del año pasado -aún durante la gestión en la CNC del gobierno encabezado por Carlos Menem- e incluyó el decomiso de equipos que, ahora, la CNC dispuso restituir para que la radio vuelva a funcionar. Pero además, la decisión de la autoridad en materia de comunicaciones obliga a rever la decisión judicial que ordenó el decomiso de los equipos y se proceda a su desprecintado. La medida equivale a un triunfo no sólo de FM Alas, sino de la comunidad de El Bolsón, que se movilizó en defensa de lo que considera su radio. Vecinos, organizaciones comunitarias no gubernamentales, partidos políticos, fuerzas barriales, organizaciones sociales y de derechos humanos e incluso otros medios -potencialmente competidores de la emisora- reclamaron a las autoridades por el derecho a la información y a la libertad de expresión que vieron cercenado con la salida del éter de FM Alas. Entre los más activos impulsores del regreso de la radio estuvieron la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (Utpba), la Red de Nacional de la Comunicación, la Federación Argentina de Radios Comunitarias (Farco), la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (Amarc), la Asociación Latinoamericana de Educación Radiofónica (Aler) y la Red Patagónica por los Derechos Humanos. En el aire, pese a todo Aunque en condiciones harto precarias, durante los 16 meses que tuvo vigencia la medida dispuesta por la anterior conducción de la CNC -y que no fue inmediatamente subsanada por la nueva conducción- la radio se mantuvo en el aire. Primero, lo hizo instalando sus estudios en una plaza del pueblo, con un equipo que le facilitó solidariamente FM Libre de Bariloche. Posteriormente, desde Buenos Aires FM La Tribu le prestó un transmisor para que las emisiones no cesaran, según informaron a esta publicación fuentes cercanas a las partes. Salvo cortas interrupciones, la radio hizo prevalecer el espíritu de la comunicación por sobre las arbitrariedades de las que había sido objeto. Ahora, ya sin el cepo ni la mordaza que significaba la decisión de la CNC, vuelve a funcionar en condiciones de normalidad. Además, durante ese lapso enriqueció su programación en calidad, ya que recibió muestras de solidaridad de personajes vinculados fuertemente a la actividad cultural. El escritor uruguayo Eduardo Galeano, Juan Carlos Baglietto, Leo Maslíah, Julio Lacarra, Hécto Ledo, Luisa Calcumil, Lito Vitale y Alberto Granado, además de periodistas de distntos medios locales y nacionales hicieron llegar a los micrófonos de FM Alas sus voces de aliento y solidaridad.

FM Cristal demanda a intendente de Cipolletti

La emisora rionegrina FM Cristal 92.1 demandó al jefe comunal de Cipolletti, Julio Arriaga y al municipio por daños y perjuicios, competencia desleal y discriminación, causa ésta que se suma a una anterior presentada por presunta malversación de fondos, incumplimiento de los deberes de funcionario público y amenazas. Las acciones judiciales fueron determinadas por la asesoría legal de la emisora luego de 4 años de experimentar situaciones encuadradas dentro de los cargos expuestos, justo a partir de la llegada al poder del actual intendente Arriaga. Según manifestó el director propietario de la emisora, Angel Eduardo Gartner, “desde que asumió este hombre vino la discriminación informativa y publicitaria a la radio”, a la vez que se produjeron intentos de incendio, destrucción del transmisor y amenazas de muerte al personal. Todo comenzó cuando Gartner denunció penalmente en el juzgado 4 de General Roca, la asignación publicitaria a agencias truchas y a medios de otras ciudades. Cuando éstos reconocieron que jamás habían recibido dinero ni efectuado coberturas para la municipalidad, se llegó a la conclusión de que, según cuenta su propietario, “el dinero iba directamente a voceros del intendente mediante talonarios falsos y tercerizando contrataciones que violaban las ordenanzas municipales”. Desde 1996 hasta hoy, todas las amenazas, intentos de incendio y destrucción de equipamiento y móviles habrían sido producto de una barra brava que “hacían el trabajo sucio de Arriaga”, dice Gartner. La situación llegó al punto tal que el Concejo deliberante local tuvo que salir a blanquear a estas personas, hoy alejadas de los pasillos municipales y cada vez más cerca de un dictamen judicial. Radios ilegales Según cuenta el propietario de FM Cristal, la emisora es la única que transmite de manera legal. “Existen 23 FM truchas y 1 AM con licencia vencida hace más de 15 años, pero que ahora está a cargo de una empresa que dice haber comenzado sus actividades en 1999”, comenta Gartner. Al parecer, desde 1996, el intendente habilitaba emisoras con licencias comerciales de agencias de publicidad. Estas FM recibían publicidad como agencias pero facturaban como radios. Todas estas habilitaciones llegaron a buen puerto pese a la mirada atenta de miembros de la delegación Neuquén del Comfer y la CNC. “De esta forma –remarca Gartner-, las radios proliferaron de manera alarmante, generando interferencias, ensuciando el mercado publicitario y amparadas en una impunidad oficial que tenía como reaseguro el silencio más absoluto de todo cuanto pudiera cuestionarse del accionar municipal”. Premiada Justo en el período 1996/2000 la emisora alternó momentos difíciles y otros que la llenaron de orgullo, porque se convirtió en la radio rionegrina más galardonada a nivel nacional. Fue la única en Cipolletti que fue nominada a los premios Martín Fierro del interior y cuenta en su haber con el mejor operador del interior, Cristian Villagra, que fue elegido en Mar del Plata por la Sociedad Argentina de Artistas Profesionales. Desde hace dos meses la emisora transmite en sus nuevos estudios de Lavalle y Belgrano.