Al lector no le resultara original, si opinamos que la Radiodifusión en este país es un verdadero caos, específicamente en FM. La falta de solución por parte del Estado, a través del Comfer desde hace años, ha dado por resultado lo que era de esperar y que se profundiza en grandes ciudades: hay más emisoras de las posibles en el dial. Sin entrar en un análisis de contenidos de las emisoras, pero en función del comportamiento de algunas de ellas, el sistema se presenta como selvático. Sólo sobrevivirá aquel que tenga mas fuerza, mas vatios. En una primer etapa los “Radiodifusores” (hay quienes les cabe el título, a otros no tanto) que ingresaban al sistema trataban de ocupar un canal libre y de mantener un canal de separación con una emisora colega. Luego no importó esto último y comenzaron los problemas al ocuparse canales adyacentes. El tiempo pasa y al ingresar mas emisoras al dial, aparecen casos extremos con radios que se meten arriba de otras existentes sin importarles nada mas que ellas mismas. El carácter selvático de la Radiodifusión actual genera una situación por demás conflictiva entre seudos colegas. Paralelamente se genera una polución Electromagnética sin precedentes en nuestro país. Así como un árbol en un bosque solo puede existir si se eleva a lo más alto para poder ver el sol, las emisoras elevan sus potencias radiadas, PRE, para superar el alto ruido existente. El ruido generado o polución electromagnética se genera entre las emisoras como consecuencia de equipos con deficiente salida espectral, productos de intermodulación, efectos de Reirradiación, etc. Dicha polución genera un ruido en la banda, que hace que día a día se tenga que aumentar el nivel de salida de los transmisores para poder superar este umbral de ruido. Una buena recepción necesitará de una aceptable relación señal/ruido, S/N. Lo ideal es bajar el ruido y consiguientemente se podrán bajar las PRE. Como anécdota, recuerde las primeras FM por el año 1987 que salían con los Mauro de 40 W, y el radio de cobertura era mas que satisfactorio. Hoy, con esa potencia (en una ciudad saturada de emisoras) apenas se cubriría un pequeño barrio. Mientras el Comfer aún no demostró todo su potencial de acción, cada uno aplica el poco afortunado “sálvese quien pueda”. Y esto es irreversible, el sistema así fuerza a los radiodifusores a aumentar su PRE, ya que si una emisora que emite desde hace años no logra ser recepcionada por interferencias que le ocasionan, no podrá vender publicidad y desaparecerá. Si la interferencia es provocada por el transmisor de un radiodifusor, habrá que chequear su sistema con instrumental adecuado. Pero la mayoría de las veces se da que la misma es ocasionada por la suma de dos o más emisoras y allí el problema se resuelve de otra manera. Reirradiación Este fenómeno aparece cuando dos o más emisoras instalan sus antenas muy próximas, como es el caso de compartir la terraza de un edificio. El campo radiado de cada emisora con todas sus componentes armónicas, ingresa por la antena de la otra emisora y viceversa. Esta señal va al transmisor y allí se producen efectos de mezcla, entre todas las componentes del espectro y se retransmiten varias señales no deseadas. Este efecto se da en los transmisores de banda ancha. Muchos de los equipos del mercado así lo son, sean o no, homologados. Ejemplo: tenemos dos emisoras, la A emite en F1=106.5 Mhz, la B emite en F2= 94.3 Mhz. Si analizamos los productos de intermodulación de 3° orden tendremos dos señales espúreas o no deseadas: Im1= 2F2-F1 y Im2= 2 F1-F2 Im1= 82.1 Mhz Im2 = 118.7 Mhz Observamos que aparecen dos señales que afectarán sin dudas a otros servicios, como el aeronáutico en 118 Mhz. Podemos escoger otras frecuencias como ejemplos y obtendremos una cantidad enorme de combinaciones. Si a esto le incorporamos más emisoras que sufren este efecto de proximidad, el resultado es desastroso. La existencia de 7 emisoras muy próximas compartiendo una terraza, puede llenar todo el dial de un receptor. La solución es colocar un filtro a la salida de cada transmisor que sólo deje pasar su frecuencia de operación. Otra solución es alejar las antenas (dejar de compartir la terraza). Las terrazas compartidas son los principales centro de generación de polución electromagnética en las ciudades. En una medición realizada en un edificio en Mar del Plata, para dar un ejemplo, coexisten mas de 8 emisoras en la terraza. El nivel de ruido en torno al edificio, en el centro de la ciudad, está por encima de los 49 Dbuv. Esto implica que varias emisoras que emiten en lugares alejados al centro no se las pueda sintonizar en esta zona, pues no alcanzan a superar este umbral de ruido. Antes de instalar el sistema irradiante: 1° Se deberá tener en cuenta, (incluso cuando realicen la carpeta técnica) que el transmisor genera una zona de bloqueo en torno a unos 115 Dbuv, y los licenciatarios deberán satisfacer todos los reclamos que por interferencias dentro del área de bloqueo que genere la estación. La responsabilidad no incluye reclamos por mal funcionamiento de receptores o al uso de antenas de TV con booster. 2° Si el licenciatario realiza la solicitud para la instalación de la emisora en una terraza compartida, o una distancia menor a 60 m, en donde se encuentran otras emisoras de FM o TV deberán incluir información al respecto, debido a los fenómenos referidos de Reirradiación, justificando la no interacción entre ellos. Res 142-96 Sec. de Comunicaciones. 02296 45-1312/45-3507 Sintel@ciudad.com.ar