Electrónica

La recesión afectó tanto a las compañías grandes como a las PyMEs

Electrónica: la crisis atravesó al
sector a pesar de las proyecciones

Las empresas que exportan esperaban ser beneficiadas con la devaluación, pero la suba de los precios y la caída de las ventas crearon otra perspectiva. La incertidumbre invadió al mercado pero aspiran a una reactivación para el año que viene. Hay empresas que trabajan cuatro días a la semana para reducir costos y otras buscan alternativas para sobrepasar la situación recesiva.

A partir de la devaluación, la electrónica debería ser uno de los sectores beneficiados por la exportación”, indicó la gerente de la Cámara Argentina de la Industria Electrónica (CADIE), Alicia Español. Sin embargo, el horizonte parece ser otro: los precios aumentaron al doble en algunos casos y las ventas cayeron al punto que hay empresas que trabajan cuatro días a la semana para reducir costos.
Así, la incertidumbre juega un papel principal en el sector, por lo que las compañías ya no esperan repuntar durante este año, sino que aguardan la llegada de 2003 para “ver que pasa”, explicó Español. En este sentido, la gerente de la cámara sostuvo que “el horizonte de planeamiento para este año está muerto. Ahora, las empresas esperan que a partir del año que viene haya algún tipo de reactivación”.
La exportación de productos terminados a países de bajos recursos es la razón por la que algunos se animaron a fantasear con una mejora cuando la devaluación se puso en marcha. De acuerdo a las cifras de los últimos años, el sector de la electrónica exporta un 5 por ciento de su producción a países de Africa y Latinoamérica, como Perú y Cuba. Entre los productos que se comercializan al exterior, se destacan los equipos de telefonía móviles para radio taxi y las centrales telefónicas. Sin embargo, Español admitió que en 2002 “no se exportó casi nada”. De esta manera, las empresas no llegar a compensar la balanza y la crisis interna hace que cubran su estructura de costo fijo pero no alcancen a obtener ganancias.
Otro de los factores que complica la situación del sector es la importación de productos e insumos que el sector realiza para poder llevar adelante su negocio. Como consecuencia de la devaluación y posterior pesificación, el precio de los productos aumentó más del 100 por ciento y se restringió el circulante, por lo que cada vez se hace más difícil comprar mercadería extranjera.

Más problemas

Actualmente, en el Ministerio de Economía de la Nación está vigente una resolución que fija el manejo de las divisas para importación y exportación. Según Español, “esto también perjudica al sector porque, hasta el año, se hacían las negociaciones con el proveedor, pero ahora, el Estado fija los plazos de pago”.
El problema empieza cuando las condiciones para saldar las deudas no se pueden cumplir y comienza el recorte de gastos, que también afectó a los planteles que poseen las empresas.
Los principales clientes del sector de la electrónica son las telefónicas que, actualmente, “están en una lucha muy fuerte con el Estado por las tarifas. Por eso, quieren demostrar lo pobres que están y no renuevan ningún equipo. Las telefónicas se vieron muy perjudicadas con el escenario económico actual, pero también es un elemento de presión que nos pone más ruido en la línea a nosotros y genera resultados muy negativos”, explicó la gerente de CADIE.
De todos modos, este es uno de los mayores inconvenientes de las grandes compañías del sector. Por su parte, las pequeñas y medianas empresas locales encuentran problemas para abrirse al exterior. “El mercado interno está totalmente parado, por lo que las PyMEs también apuntan a la exportación, pero para eso es necesaria una estructura armada”, manifestó Español.
La desaparición del crédito que provocó el actual horizonte económico también perjudicó directamente al sector de las empresas de electrónica.
En algunos casos, las tasas de interés superan el 10 por ciento y, en otros, sólo se les otorga créditos a los clientes conocidos. De todos modos, ninguna de las tasas que se cobran bajan del 5 por ciento mensual.

En busca de oxígeno

Para aliviar las consecuencias de la crisis, algunas empresas comenzaron a optar por el reciclado de productos. Este es el caso de los teléfonos celulares que tienen fallas o no funcionan. Algunas compañías compran los aparatos a los fabricantes, los reciclan y los ubican nuevamente en el mercado.
El Mundial de Fútbol también se esperaba que fuera una buena oportunidad para aumentar las ventas. Pero el evento deportivo se desarrolló acorde a las circunstancias que atraviesa la Argentina.
Por estos días, en la cámara ajustan los últimos detalles de un documento que será presentado en los próximos días para mostrar las cifras oficiales del sector. Y es claro que las perspectivas inmediatas no son las deseadas.