Señales de Cable

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No pasó nada durante meses y de repente se encendió la mecha. Acusaciones cruzadas, injurias, presentaciones judiciales, solicitadas, nervios y unas cuantas cuotas de vanidad tomaron la posta en la carrera para obtener la última radio de alta potencia que dispone la ciudad de Buenos Aires. Los protagonistas son cuatro oferentes con cientos de diferencias y un solo punto en común: cada uno se considera ganador de la licencia. Pero el Gobierno ya decidió quién será el beneficiado. Y nadie está dispuesto a colgarse el cartel de perdedor. Los jugadores no convencidos con los resultados saben que hay que buscar aliados para la batalla final, hacen ruido para llamar la atención y exploran irregularidades en todo el terreno. En el del goleador y en el del árbitro. Pero hasta el momento la posición es inamovible. El Castrilli del concurso, el interventor Carlos Caterbetti, parece estar dispuesto a dejar en claro porqué no acepta reclamos y esgrime sus razones. EL PARTIDO POR DENTRO El proceso de concurso público para la adjudicación de la frecuencia 106.9, luego de ser suspendido por la gestión de Gustavo López a inicios de 2000, se inició en octubre de 2001 con la presentación de Milenium Media (integrada por Santiago Pont Lezica, los empresarios del rubro automotor Hugo y Juan Carlos Belcastro y Analía Suárez); Nostalgie Amsud (liderada por Mario Pergolini y Diego Guebel); Radio Al Sur (presidida por Enrique Albistur) y la Corporación Argentina de Radiodifusión (CARSA, perteneciente al grupo español Prisa). Una vez que cada uno de ellos analizaron las propuestas de los otros, se impugnaron mutuamente en diciembre. La caída de De la Rúa expulsó a López del organismo y según confirmó su sucesor, Carlos Caterbetti, “el trámite estaba en blanco y aún no se había comenzado a evaluar las ofertas”. Así, la nueva administración comenzó a estudiar las propuestas bajo las premisas de cualquier concurso: aspectos patrimoniales y técnicos primero para ver si el oferente estaba en condiciones de pasar al siguiente eslabón. Y cuestiones personales y culturales más tarde, a cargo de una comisión de notables designados “ad honorem” por la Secretaría General de la Presidencia de la Nación. El proceso pasó por todas las áreas jurídicas y técnicas del Ejecutivo para corroborar la exactitud de los pasos administrativos. Empezó en el propio Comfer, luego fue a la Secretaría Legal y Técnica de la Presidencia. Desde allí las evaluaciones siguieron camino hasta el Ministerio del Interior y como éste continuó con el aval, la Auditoría General de la Nación accedió al expediente. El último recurso válido lo planteó la Procuración del Tesoro. Sólo después de estos pasos le llegó el decreto al Presidente. El trajinar del concurso depositó a Milenium como favorita, con 90 puntos sobre 100. Segunda quedó Nostalgie con 86, tercera Radio Al Sur con 75 y cuarta CARSA con 71. Esta, si bien no debería haber participado por estar conformada con capitales externos –la ley sólo avala los de países con acuerdos de reciprocidad de inversiones y España no tiene uno con la Argentina-, igual fue evaluada. Recién a fines de julio, cuando se conoció la salida de FM Milenium del aire por rescisión adelantada de contrato con Radiodifusora Esmeralda (titular de la 106.3) y el Comfer adelantó a través de los medios que ésta había sido considerada digna de alcanzar la licencia, los otros concursantes salieron a mostrar las garras. La respuesta oficial no tardó en llegar. A una acusación le correspondió una contestación para demostrar que el concurso gozó de transparencia y que el Gobierno no cedió ante las presiones. “Siempre pasó lo mismo en los concursos históricos que tuvo el Comfer -se queja Caterbetti-. Todos los oferentes siempre dicen que ganan y cuando no pueden buscan al culpable. Repito: no hubo ni manipuleo, ni preferencias. Recibí a los cuatro y a todos se les dije cuál era mi postura frente al tema”. EL DISCONFORME El jugador más combativo fue Enrique Albistur, líder de Al Sur y concesionario de los carteles en la vía pública en la Capital. Su estrategia para denunciar irregularidades en el Comfer comenzó con una solicitada en los principales diarios nacionales. Y siguió con un acercamiento a los medios para que los periodistas se hagan eco de su mensaje: algo raro tiene que haber detrás de este concurso. Pepe, como lo llaman sus íntimos, no podía creer que su proyecto de radio se había caído. El 12 de agosto, una hora más tarde de lo previsto y rodeado de una veintena de actores, Albistur habló en conferencia de prensa desde el Espacio Cultural ND/Ateneo. La idea fue mostrar la injusticia a flor de piel. Y la actitud de los panelistas fue tan intimidatoria que hasta parecía una falta de respeto plantear dudas. Porque el séquito de artistas se encrespaba ante las preguntas de los periodistas y cualquier apreciación que no encuadraba dentro de las premisas de Radio Al Sur, se veía envuelta en la fina ironía de comediantes, tan aduladores del jefe como desinformados del tema. La propuesta de Al Sur es una radio ciudadana, con música argentina y contenidos netamente nacionales. Un espacio para los artistas y músicos sin aire y para que los porteños lleven sus preocupaciones y sus historias. Una radio que busca reivindicar la cultura nacional. “No es que las otras sean malas, pero nuestra propuesta era la única que privilegiaba la difusión de la cultura. Los otros contemplaban difundir hits, música ambiental y una reproducción del top 40 español”, atacó el actor Coco Sily, uno de los más activos participantes del proyecto. “Si nos callamos y nos adormecemos –continuó- las decisiones no van a ser tomadas en beneficio de la cultura nacional”, deslizó entre la aprobación de Adriana Varela, Virginia Inocentti, Daniel Araoz, Jaime Torres y Horacio Fontova, entre otros. Sin embargo, el encargado de la munición gruesa fue el propio Albistur: “a partir de la asunción en enero de su nuevo interventor Carlos Caterbetti, se han producido en el área del COMFER maniobras poco claras, tendientes a influir en la decisión presidencial a favor de otras propuestas que lejos están de representar al arte y la cultura nacional. Esto fue muy extraño, ya que Radio al Sur era la propuesta mejor posicionada mientras el concurso se venía realizando en forma normal, hasta el cambio de autoridades y queremos hacer valer el derecho que hemos ganado en buena ley”. Y continuó: “Caterbetti, un ilustre desconocido que no tiene nada que ver con los medios, una bestia nombrada por licitación, cambió los miembros del Comité de Preadjudicación y reemplazó la comisión de notables por otros que en realidad son tres notables desconocidos. Y ahora nos hemos visto envueltos en una maniobra de este interventor, que de pronto benefició a una propuesta que estaba última en la anterior comisión de notables”, expresó. “Son tres profesionales de un nivel altísimo y no fueron puestos a dedo -explicó Caterbetti a R&TA-. Guillermo Altabe, Guillermo Ferraro y Luis Lamberti no tienen compromisos políticos ni empresariales y yo los invitaría a que vean sus currículums”. Otro de los temas que más le llamó la atención a Albistur fueron los tiempos de resolución del concurso: “En este tipo de trámites se tarda mucho en tomar decisiones. Cómo puede ser que una comisión de notables que asume el 28 de junio diga en una semana que nuestra propuesta cultural no queda. El Comfer ha demostrado una eficiencia fuera de lo común”. En realidad, el empresario dejó traslucir su opinión al cuestionar: “¿Milenium dejó de pagar el alquiler en la 106.3 porque habrán recibido algún guiño de que tenían posibilidades de ganar?”. Por otro lado, comentó que tuvo que consultar a la Iglesia para saber si era verdad lo que decían los medios que había intercedido a favor de Milenium. “La Nación dijo que el vocero del cardenal Jorge Bergoglio, el padre Guillermo Marcó, párroco de San Nicolás de Bari, había intercedido. No puedo creer que un integrante de la Iglesia estuviera haciendo lobby para una de las propuestas. Pero por suerte hoy me confirmaron que el cardenal no está enterado de este tema”, indicó. R&TA le preguntó si realmente existía la obligación de una propuesta cultural local en el pliego. A lo que Sily contestó: “No como obligación, pero el Comfer pidió que los oferentes tuvieran una alta identificación con la cultural nacional. Era un punto a destacar dentro de la propuesta”. Luego, esta publicación indagó: ¿Por qué la propuesta de ustedes puede ser exitosa comercialmente? “Como empresario uno sabe los riesgos que corre. Y de mi experiencia puedo decir que es uno en los que más certeza tengo que los riesgos serán pocos. En mi vida me ha tocado más veces perder que ganar. Pero esta vez, por la calidad de la propuesta, siento que hemos ganado y lo vamos a defender hasta las últimas consecuencias”, contestó Albistur. Estas medidas incluirán un festival y un “bombazo” sorpresivo en el Comfer con batucada y murgas incluidas para protestar. Por el momento, la gente de Al Sur cree que “la evaluación del Comfer no es vinculante y a través de un escrito presentado hemos logrado parar la decisión porque planteamos la ilegalidad de la adjudicación a Santiago Pont Lezica, un discjockey pasador de música extranjera”, dijo el empresario con una media sonrisa. Por otro lado, el socio de Albistur, Luis Suez, dueño de Film Suez, se preguntó: “¿Cómo va a hacer Milenium para mantener la radio que supuestamente quieren darle si salió del aire porque no podía pagar?” “No se hagan problema –saltó desde atrás un asistente a la conferencia- déjennos fracasar entonces si creen que esta propuesta no va a ser rentable”. De inmediato, el diputado de la ciudad Enrique Rodríguez, aprobó la apreciación y pidió la palabra. “Lo que queda claro es que la oferta económica y técnica está superada. No es verdad que la cultura no sea rentable”. Sin embargo, el propio Suez deslizó una confidencia: “Le a dije a Pepe que plata no íbamos a ganar, pero si querés te acompaño”. EL GOLEADOR Santiago Pont Lézica, la cara visible de Milenium Media, aseguró en diálogo con R&TA que “iba a ser cauteloso porque es mejor ser amigo del silencio”. Pero no pudo evitar salirse del molde planteado ante una catarata de acusaciones por todos los costados. “El concurso tuvo reglas de juego que todos aceptamos. Esto es una competencia de radiodifusores y yo juego limpio. No tengo partido, ni programa de TV ni soy funcionario. Si molesta que gane una de las radios más importantes de los últimos años en el Argentina, me da mucho orgullo. Esto no empezó hace una semana y llamó un cura para que lo acelere; es todo mentiras”, aclaró. Para él, “Milenium no es un proyecto; es una realidad con casi 5 años en el aire. Si uno pide antecedentes, calculo que estar en el aire es un punto distintivo. Es imbatible. Si 400 mil personas por día no es antecedentes, qué es entonces? Hemos recibido 38 mil adhesiones por carta y email, más los llamados”. Su preferencia inicial se quebró cuando salió a hablar de Albistur: “El que más ruido está haciendo es el que menos antededentes radiofónicos tiene. Tiene buena cartelería y los artistas que el dice que lo apoyan salen en Milenium desde hace 5 años. Dudo de las firmas. El proyecto de Radio Al Sur es irreal. Para eso existe Radio Nacional y de la Ciudad”, entendió Pont Lézica, quien ya prepara la nueva etapa de radio en otro lugar y tiene en mente otras estaciones en caso que no le adjudiquen la frecuencia. EL QUERELLANTE Renuentes a hablar con los medios, Pergolini y Guebel prefirieron no comentar sobre el tema ante una llamada de R&TA a Cuatro Cabezas, la productora. Sin embargo, la estrategia de la dupla parece hasta ahora la más efectiva. Nostalgie Amsud tiene puestas las fichas al cambio de la FM X4 (106.5), una PPP que de salir otra radio en la frecuencia en cuestión, quedaría tapada de lleno. Disconformes con la resolución del Comfer, y amén de algunas interpretaciones escuetas sobre el concurso al que consideran “acelerado”, los empresarios presentaron una denuncia penal en el Juzgado Federal N° 4 con el fin de iniciar una investigación sobre un posible delito y pidieron que Carlos Caterbetti se abstenga de intervenir. Esa, según expresó el propio interventor a este medio, es la única razón por la que no sale la firma del Presidente, quien aún espera una decisión de la justicia aunque el Comfer confirme que la presentación es atemporal. “Igual –concluyó Caterbetti- es muy difícil que cumplimentados los actos administrativos donde participaron todas las áreas técnicas y jurídicas del Gobierno, el Presidente opte por otra que no sea la primera de la lista”.

Piden detalles por la venta
de varias FM

La comisión de Comunicaciones de la Cámara de Diputados emitió un dictamen para que el Poder Ejecutivo informe sobre una serie de ventas de radios FM a grupos extranjeros que podrían haber lesionado las disposiciones de la ley de radiodifusión. El proyecto original elaborado por Pedro Calvo (UCR Capital) especifica que es necesario conocer las actuaciones oficiales por las que se aprobó la compra de las 9 estaciones del Grupo América a favor del conglomerado mejicano CIE. Y bajo qué criterios se dio el visto bueno del Gobierno para que la empresa estadounidense Emmis se quede con el 51% de Radio 10 y FM Mega. Si bien estas transacciones son de larga data, el legislador estimó ahora conveniente que el Comfer muestre los expedientes y se determine si las mismas mantienen multiplicidad de licencias o ejercen un control que la ley prohíbe. “Es nuestro deber –expresó Calvo- reparar los errores que la falta de legislación origina en el ámbito de nuestra sociedad. Los medios de comunicación social cumplen un rol fundamental en el entramado de la sociedad argentina: dejarlos desregulados y en posición de resolver por su propia cuenta el destino de frecuencias que, en última instancia, pertenecen al Estado Argentino, implica complicidad frente a una irregularidad que raya con el delito”.