AHORA SE POSICIONA EN EL ACCESO A INTERNET
NAHUEL SAT abrió el haz de los negocios
JOSE LUIS CHVAPIL |
José Luis Chvapil, gerente de ventas para América Latina de Nahuel Sat está convencido que gracias a la mención de Crónica TV en su institucional, la compañía se hizo conocida en forma masiva. Sin embargo, la crisis post devaluación obligó a virar las estrategias comerciales por más inserción positiva que se goce dentro del mercado. Hoy, la firma proveedora de acceso satelital a canales y empresas abrió el panorama y no desaprovechó el nicho que dejó libre la carencia de fibra óptica en el interior para el acceso a las comunicaciones por banda ancha. R&TA: ¿Qué busca la empresa cada vez que se presenta en las exposiciones? Chvapil: Estar acá es más que nada por presencia, con los canales, con los cableoperadores, para afianzar nuestro liderazgo en el mercado satelital del Cono Sur. El objetivo nuestro nunca fue poner una stand y sacar varios negocios; si tener una relación con los canales locales y una mayor presencia en el interior. Tenemos un satélite argentino y queremos que la mayoría estén en nuestro satélite. ¿En qué sentido el cliente aprecia que la firma sea de origen nacional? Tenemos todos los canales de Argentina para el uso ocasional. Es una muy buena prestación y precio porque el trato es muy directo desde nuestro telepuerto. Esa atención dinámica y efectiva de Nahuel con los canales nos diferencia de otros satélites ubicados en Estados Unidos. Gracias a Crónica nos conocen en todos lados. Crónica fue el niño mimado de NahuelSat: lo hemos ayudado porque es un muy buen cliente. Lo hemos tenido desde un inicio y nuestro ideal es que siempre sea así el trato diferencial de un satélite argentino con un canal local. ¿Cuál es la estrategia de la empresa frente a la competencia? La idea es que a medida que se vayan venciendo los contratos de las emisoras con Panamsat se vuelquen a Nahuel porque los vamos a atender mejor. No hay un precio fijo en la capacidad satelital. Nuestro objetivo es que a igualdad de precio el canal nos elija. Es la opción que planteamos para salir de esta crisis. ¿Cómo fue la reacción de la empresa luego de la crisis post devaluación? La devaluación no nos dio beneficios. Nos pegó duro. El 80% de la facturación de Nahuel es por la Argentina. El resto es de países limítrofes. Hubo que renegociar los contratos en dólares y se pesificaron. Hasta que se produce el reacomodamiento tuvimos y tenemos una pérdida muy grande del orden de la cuarta parte de la facturación. ¿Por eso se potenciaron otros servicios no tradicionales? Sí, por eso abrimos el negocio. Pensemos que muchos clientes ya no pueden comprar al valor de antes la capacidad satelital, entonces se produjo una disminución del valor promedio de esa capacidad en la región. ¿Qué posibilidades tiene el servicio de acceso de banda ancha satelital frente a la fibra óptica? Son cosas distintas porque hay mercados para cada uno de ellos y en general donde vive la fibra no vive el satélite y viceversa. Puede haber un solapamiento de la cuestión cuando la fibra no llegue a la última milla. Hay una tendencia a capilarizar todo el país, pero no vamos a llegar en el sur a la estancia de Ted Turner, por ejemplo. Eso se da por microonda, satélite o por wireless. Internet es pura y exclusivamente un transporte muy veloz para la fibra. El tema es que usando el satélite tengo que cobrar la ida y la vuelta. ¿Ha buscado entonces la empresa insertarse en ese nicho que deja la fibra? Si no se tiene acceso en la última milla necesita el satélite. Nosotros damos un servicio de Internet de alta velocidad. Y en general suele ser para un mayorista de Internet en un pueblo determinado. Si nos encasillamos en vender sólo capacidad satelital hay mercados que los vamos perdiendo. Otros ganan terreno porque ofrecen otros productos. Estamos presentes en muchas empresas para solucionar sus proyectos desde la reparación hasta la instalación. La idea siempre fue participar más en los proyectos. En 2009 es el fin del Nahuel 1 ¿Cómo se preparan para poner en órbita al 2? El objetivo siempre fue tener una flota de satélites en actividad y llegar a un reemplazo. Hay posiciones correspondientes a la Argentina y si no ponemos nosotros un satélite lo hacen otros. Tenemos fechas precisas en las que tenemos que ocupar determinadas posiciones. Las condiciones de hoy hicieron que los socios decidieran justificar las inversiones con un resultado claro. La idea es terminar de vender lo que nos queda del Nahuel 1 y encarar la pre venta del Nahuel 2. ¿En qué eslabón se encuentra la construcción del segundo satélite? Hoy fabricar un satélite sale 300 millones de dólares. La decisión que se está tomando es ver la capacidad que se le va a dar. Hay que analizar si hay mercado para mi satélite y a qué países debo enfocar para vender mi servicio. Ese estudio me indica si el satélite debe ser pequeño, grande, con haces apuntando a determinados países y a otros quizás no.