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Exclusivo: Gustavo López evalúa el debate

“Es una pena que sólo se discutan aspectos sectoriales”

El interventor cree que hay aspectos dejados de lado por centrarse en intereses particulares. Sostiene que la postura del Gobierno no se discute y explica porqué va a ser imposible consensuar en este contexto. La versión de un hombre que fluctúa entre la ansiedad y la calma

Un tanto relajado pese a la intensa actividad que lo lleva a viajar seguido por el país, Gustavo López habló en exclusiva con R&TA sobre el debate que desde hace dos meses genera el proyecto de ley del Gobierno en distintos sectores de la radiodifusión local. Si bien ve con buenos ojos que “por primera vez en la historia argentina una ley se discuta en el interior del país”, no oculta su deseo de tener un debate que se realice “más rápido, porque a medida que uno avance, la discusión en el recinto también se adelanta”. López no está en contra del mecanismo que impuso la Comisión de Comunicaciones de la Cámara de Diputados para la realización de audiencias públicas en distintas regiones hasta agosto. López fluctúa entre la ansiedad y la calma. “La ley recibe básicamente tres críticas y el

resto no se discute. Es una ley de casi 200 artículos que está cuestionada sectorialmente e interesadamente. Pero por otra parte, que sólo tenga tres puntos de conflicto me da la pauta de estar frente a una ley de mucho consenso”, advierte sin duda en su despacho del sexto piso de Suipacha al 700. R&TA: ¿Cuáles son esas tres posturas interesadas? López: Una de ellas es sobre las cooperativas, que cuestionan que no se permita ser radiodifusores a las de servicios públicos. El proyecto avanza mucho respecto de ellas, porque por primera vez en la historia no las discrimina. Lo que entiende es que las empresas de servicios públicos, sean comerciales o no, no deben ser titulares de servicios de radiodifusión. Este es el único concepto que tenemos con un fundamento suficiente como para sostenerlo: una empresa de servicio público es monopólica, tiene subsidios, es una competencia desleal para una empresa de radiodifusión. R&TA: ¿Por qué cree que se quejan? López: Las cooperativas se quejan de una supuesta discriminación cuando no la hay. No rescatan que el proyecto las incorpora. La decisión fue seguir la legislación casi unánime en la materia de que las empresas de servicios públicos no deben ser titulares de servicios de radiodifusión, que incluye a las comerciales y no comerciales. R&TA: ¿Cuáles son los otros puntos de cuestionamiento? López: El otro cuestionamiento es al concepto de cadena nacional y regional de tele-visión. Hay argumentos a favor y en contra. A nosotros nos parece que el sistema es bueno porque ayuda a extender la TV abierta en el país, pero no es un tema central dentro del proyecto. Nos parece importante que si se deja, se incorpore lo que tenía el proyecto original que son las obligaciones que de producción nacional para los licenciatarios que obtuvieran esas cadenas. R&TA: Queda una crítica... López: Sí, el tercer punto que aparece como más filosófico, me parece que es inocuo. Es el que cuestiona ARPA, sobre si los servicios de radiodifusión son considerados de interés público, si el espectro forma o no parte del dominio público del Estado. Me parece que hay una inter-pretación errónea de lo jurídico y filosófico. Algunos piensan que el Estado se lo puede apropiar o avasallar y en realidad los ríos y las rutas son bie-nes pú-blicos del Estado. Se con-cesionan y acá sería lo mismo. Me parece que es intrascendente la discusión. Está lo suficientemente claro. No hace a la discusión de la ley. R&TA: Entonces, ¿qué aspectos hacen a la discusión de la ley? López: Hablar por ejemplo sobre quienes pueden ser titulares de servicios de radiodifusión. Es un punto central decidir si las empresas de servicios públicos pueden serlo o no. Me parece importante el límite a la multiplicidad de licencias, la cuota de pantalla de cine nacional como fomento de la actividad, el multimedio oficial por ley con financiamiento genuino. Todo eso no se cuestionó y se hizo hincapié en estos tres puntos por peleas sectoriales que son legítimas, pero no son centrales. Una ley para todos El esquema es simple. Para el Gobierno, la complejidad de la ley de radiodifusión parece radicar entre posturas individualistas y el deber de abordar una normativa que no deje a nadie fuera de su alcance. “No quiero que sea tomado por una ofensa, -dice López- pero creo que entre otras cosas no hay ley porque los grandes grupos de radiodifusores se opusieron equivocadamente, porque las ventajas coyunturales que se pueden obtener a través de la presión de estos grupos frente al Poder Ejecutivo para obtener un decreto a la larga los termina perjudicando a todos”. Para el funcionario, “no hay mejor seguridad jurídica que la que otorga una ley y lo que se ha hecho en materia de radiodifusión hasta ahora es ir poniendo parches que hoy hace que tengamos una ley que no le sirve a nadie, que es obsoleta, que se hizo cuando la televisión era en blanco y negro y cuando las FM no existían”. En este sentido, el Comfer entiende que después de un año de trabajo en el proyecto, el 80% está consensuado. “El otro veinte es imposible de consensuar, porque los intereses son absolutamente antagónicos y contrapuestos y allí, en ese porcentaje está la opinión del Ejecutivo respecto del tema”, deduce el interventor. Estos puntos que señala López y sobre los cuales cree que no hay posibilidad de conciliar ni por parte del Gobierno ni del mismo Congreso, son los que sin duda tendrá un futura ley de radiodifusión pese a que a no todos les agraden. La opinión política de los representantes de turno en la Argentina siempre ha dejado su impronta en las leyes. El interventor cree que hay aspectos dejados de lado por centrarse en intereses particulares. Sostiene que la postura del Gobierno no se discute y explica porqué va a ser imposible consensuar en este contexto. La versión de un hombre que fluctúa entre la ansiedad y la calmaExclusivo: Gustavo López evalúa el debate“Es una pena que sólo se discutan aspectos sectoriales” “Hay que tener una ley que no la pueda vulnerar un decreto y que contemple a los grupos grandes, medianos y chicos. Lo que no se quiere es poner en peligro la multiplicidad y la pluralidad que hacen los monopolios. Cada uno tendrá que pelear por su porción, pero con las reglas de juego que le permita el acceso de la información a todos. Esta es la intención del proyec-to”, expresa López. Transferencias y capitales Uno de los puntos que al interventor más le interesa resaltar dentro de su política al frente del Comfer es la inminente salida de la resolución sobre obligatoriedad de la autorización previa para transferir licencias. “Queremos reponer la obligatoriedad de tener dos años desde el comienzo de las transmisiones para poder transferirlas porque entendemos que cuando se sacó el plazo se fomentó el negocio de compra-venta de licencias y se perjudicó a aquel que buscaba poner una radio”, apunta al tiempo que sostiene: “Hay que poner más radios que den más trabajo, que aquel que quiera invertir tenga la posibilidad de hacerlo. Y cuando el titular la quiera vender, primero la va a tener que poner en funcionamiento, transmitir dos años y recién después sí desprenderse. Esas cosas que hoy no están en la ley se tornan peligrosas y no las podemos legislar por resolución interna”. En relación con el tema de participación accionaria, López ve con acierto la posibilidad de integrar capitales extranjeros cuando la ley actual lo prohibe. Pero no deja de advertir que “sólo será considerado nacional cuando haya convenio de reciprocidad”, es decir cuando un compatriota también pueda ser radiodifusor en el país donde ese extranjero es considerado como argentino. Por otra parte, también cree es fundamental la cotización en bolsa de las empresas. “¿Vamos a sacarle la licencia a una empresa que cotiza sólo porque la ley lo prohíbe? Es absurdo tener una normativa que impida esto”, aclara. Caos y futuro “La situación actual es caótica, porque me toca actuar del lado del mostrador donde hay más radios fuera de la ley que dentro. Es conflictiva, compleja y lamento no haber llegado 20 años antes para haber ayudado a una pla-nificación y desarrollo de la radiodifusión”, se cuestiona el inter-ventor cada vez que cierra los ojos y recuerda que está al frente de un organismo corroído por el desinterés. Y se queja: “Hoy uno se tiene que hacer cargo de una situación que nos supera en posibilidades, pero que nos ha llevado a reflexionar acerca de cómo van a ser los pasos para normalizar radios y de esta manera hemos podido hacer un cronograma”. Sin embargo, y a pesar de haber encarado un proceso de legalización de emisoras en tres etapas, López no desconoce que una vez normalizado todo va a quedar un saldo de radios sin entrar dentro del espectro. “Se que van a tener que silenciarse y espero que esto no se tome como una limitación a la libertad de expresión, sino es ajustarse al estado de derecho”, aclara. “Puedo asegurar que cuando voy a cada rincón del país para entregar una licencia por los próximos 12 años, me encuentro con gente que a lo mejor hace trece que tiene PPP y está esperando. Lo único que yo le digo es: le estamos entregando un elemento legal y de responsabilidad. No le deben nada al Gobierno, pero ejerzan esa responsabilidad de formar e informar a la población como lo determina la ley”, apunta con orgullo. El mismo que lo lleva a pensar que “la radiodifusión no sólo tiene futuro sino que es imprescindible. Es el medio por excelencia de comunicación que nos une colectiva o individualmente. Es imposible seguir pensando en el desarrollo de la actividad, ya sea de manera comercial o no, si no hay un marco jurídico adecuado que nos contenga a todos como ciudadanos y los contenga como radiodifusores”.

Gran convocatoria en Santa Fe

Es enérgico el debate rosarino por la nueva ley

Si bien aún quedan dos jornadas más para que finalice el Primer Ciclo Anual de Radiodifusión, las primeras posturas que se escucharon el 6 y 13 de julio en Rosario desbordaron de tal energía y pasión que ya se espera un desenlace enriquecedor en pos de un debate que surge por todos los frentes. Más de 200 personas asistieron a cada encuentro en el Centro Cultural Bernardino Rivadavia de la ciudad santafesina motivados por una de las convocatorias privadas más destacadas del ámbito desde que se oficializó el texto del Ejecutivo, en mayo pasado. A la par de los panelistas, la gente pudo Gran convocatoria en

Santa Fe Es enérgico el debate rosarino por la nueva leyparticipar de manera activa en las discusiones, una posibilidad que muchos eventos oficiales de características más formales tienen restringida. La idea base de este 1° Ciclo Anual partió de la necesidad inmediata de contar con una nueva Ley de Radiodifusión, que no sea modificada a partir de necesidades coyunturales como se realizó hasta ahora desde que se sancionó, en 1980. Por este motivo, el comité organizador de Rosario 2001, entre los que se encuentran el empresario Daniel Mariatti y la dirección de esta publicación, coincidió en destacar una nueva ley “debe sancionarse de inmediato, contemplando los intereses de los radiodifusores y preservando los derechos de la ciudadanía”. Asimismo, el encuentro también fue marco para el análisis de la situación actual de la radiodifusión en la Argentina y cuáles son sus posibilidades futuras, porque una nueva normativa “sólo es posible si beneficia al conjunto de la sociedad y permite el sostenimiento de los radiodifusores y el desarrollo de nuevos emprendimientos”. En este sentido, la discusión amplió el conocimiento en torno de la incertidumbre de hoy y las inseguridades de quienes ya están lanzados en la prestación del servicio de radiodifusión en alguna de sus formas.

ARPA admitió: “Si no se arregla la saturación delespectro no hay salida”

El secretario de la Asociación de Radiodifusoras Privadas Argentinas (ARPA), Edmundo Rébora centró su mensaje durante la exposición en Rosario en la necesidad de contar con un proyecto de ley que garantice la normalización del espectro. “El 95% está ocupado. En algunas zonas ilegítimamente, en otras hay emisoras con PPP y en otros por radiodifusores golondrina o nómades, que van y vienen conforme a circunstancias que son más propias del localismo que de cualquier política que pueda esgrimir la autoridad de turno”, expresó. Y en este sentido, apuntó: “¿Qué ha hecho este proyecto de ley con este problema? Lo ha reducido a algo muy necesario como la incriminación penal. Es imprescindible que la nueva legislación tenga un marco normativo de transición que permita llevar a que la mayor parte de estas estaciones puedan transformarse en radios legales con estructuras empresarias adecuadas y que generen empleos e inversiones como es debido en un sector que está en expansión y que utiliza un recurso finito”. “Es criticable –añadió- que el actual proyecto de ley no establezca una normativa. Y si no lo establece es porque la dificultad para hacerlo es extrema. Porque si no tenemos una solución al problema de la marginalidad o a la saturación del espectro o al libre acceso a los medios por parte de quienes los han detentado hasta el momento, no hay salida posible”. Rébora dejó entendido que para la Asociación que integra es necesario un estudio exhaustivo de la situación, porque “cuando se habla de 6000 estaciones fuera de regla es una mera estimación. En el GBA el tema está absolutamente fuera de control, hay problemas de salubridad que se suman a la falta de seguridad aérea”, destacó. Y se preguntó: “¿Cómo vamos a sancionar ARPA admitió: “Si no se arregla la saturación del espectro no hay salida”un proyecto de ley que no resuelve semejante problema? El mejor marco legislativo para el momento que estamos viviendo es precisamente una ley marco que con pocos artículos le de facultades al órgano de aplicación y establecer un control jurisdiccional de los actos del órgano y de las responsabilidades que pueden tener los radiodifusores en materia de contenidos. Por otro lado, el representante de ARPA consideró que “los gravámenes vigentes que se repiten en este proyecto, van a acentuar la debilidad de la radio y la TV abierta”. A lo que agregó: “El Estado debe apuntar al sostenimiento de los negocios de riesgo. Y aún cuando consideramos abusivos a los gravámenes, es evidente que estos deben tener diferente magnitud según sea el elemento comunicacional que le interese al Estado promover”. Asimismo, vio oportuna la necesidad de efectuar una opinión positiva respecto de la actual gestión del Comfer: “Tengo la obligación de decir que nunca nuestra actividad ha estado sometida a un control tan equitativo, justo y adecuado como es el de las actuales autoridades”. Por último, Rébora indicó que el Sistema Nacional de Medios Públicos debe mantenerse con subsidios y no emitir publicidad. “La inserción de sociedades no comerciales como medios de radiodifusión genera el problema, a partir de la fuerte presión tributaria que el propio proyecto de ley establece, de la competencia desleal. Si no pagan impuesto a las ganancias o como las cooperativas, que tienen obligaciones legales muy diferentes, compiten emitiendo publicidad comercial con una radio privada, se altera el equilibrio del mercado. En materia de radiodifusión oficial, el Estado debe cumplir un rol que no es el que ha cumplido hasta el momento”, distinguió.

Etchevehere, alineado al Gobierno

El vicepresidente de la Comisión de Comunicaciones de la Cámara de Diputados, Arturo Etchevehere, manifestó en el Ciclo su concepción política del proyecto y no encontró motivo alguno para diferenciarse de la opinión oficial en la materia. Tal como lo adelantó López a este medio, el legislador entrerriano dijo en nombre del bloque de la UCR que “el desafío pasa por que cada uno deje de lado los intereses meramente sectoriales, porque no existe otra manera de sancionar una ley de radiodifusión”.

“Nuestra intención –continuó- es lograr a la brevedad una nueva ley democrática, pluralista y federal aún cuando aceptemos que es sólo una parte de las telecomunicaciones y que la futura convergencia tecnológica hará imperiosa una ley de telecomunicaciones moderna que incluya a la radiodifusión”. Asimismo, aclaró: “Se de algunos sectores que expresaron su firme oposición y fuerte resistencia a que las cooperativas se integren, pero consideramos que la misma se puede saldar exigiendo la constitución de sociedades de objeto único a fin de evitar el aprovechamiento de subsidios cruzados, uno de los argumentos por el cual se impidió a las cooperativas por muchos años ser radiodifusores”. También defendió su espíritu de hombre del interior: “Esperemos que la autoridad de aplicación firme convenios con los gobiernos provinciales de forma tal de agilizar los trámites y hacer realidad el espíritu federalista que concibe el conjunto de los legisladores”, aseveró. En tanto, estimó conveniente aclarar que “hay que dar respuesta al reclamo de los cineastas estableciendo una cuota de pantalla al cine nacional. Y por otro lado determinar qué tipo de eventos son considerados de interés social y no sujetos a venta, a fin de salvar situaciones conflictivas como los derechos televisivos para con la selección nacional de fútbol”, amplió.

Raffo se defendió de las críticas

El titular del área de Normativa y Contenidos del Comfer, Julio Raffo, se convirtió en el virtual defensor del proyec-to de ley ante las críticas y advertencias expuestas, luego de la presentación de su jefe, Gustavo López (de lo que se informa en la página 4). “Me llama la atención que distintos sectores esenciales a la vida de la radiodifusión nacional sienten que hay una norma ilegal que los perturba y no la puedo cumplir. Pero al mismo tiempo dicen que otro no está cumpliendo con la norma y hay que castigarlo. El que denuncia el incumplimiento de la ley también sube el dedo para decir que no puede pagar multas irrisorias”, deslizó. “La ley tiene que contribuir a mejorar y ordenar la realidad para que los que deban pagar las multas lo hagan y para que no sean extorsivas. Una ley que no

le de un peso tan importante al patrimonio. Entendemos que la capacidad patrimonial es equivalente a la cuestión técnica.Raffo se defendió de las críticas Si una persona quiere poner una radio y tiene que invertir 50 mil pesos. ¿Por qué, por tener 50.001 pesos es menor que el que detenta 1 millón? No es mejor radiodifusor este último”, estimó. Respecto de la concepción del espectro como un bien público del Estado, Raffo ironizó: “La clase empresarial dijo no, porque no son tiempos de intervención del Estado. Y los sindicatos también dijeron que no porque servicio público les obstaculizaba el derecho de huelga. Qué curiosidad es esta unanimidad entre empresa y sindicato”. En cuanto a la situación conflictiva en torno de las cooperativas, añadió: “Es una injusticia reducir todas las clases de cooperativas a una. No se las discrimina en la ley. Sí se restringe a algunos titulares de privilegios y cierto monopolio. Es erróneo plantear la discusión cooperativismo sí o no, porque todos sabemos los variados modelos que existen y sólo se limita a algunos”. Y expresó que no puede entender “que digan que la ley es reglamentarista. Como si la virtud se midiera por tener muchos o pocos artículos. La ley norteamericana regula hasta cuánto debe cobrar un funcionario si se queda a trabajar después de las 5. Y nunca escuché decir que fuera reglamentarista. Nada es bueno o malo por la cantidad sino por la calidad de los artículos”, puntualizó.

Por una modificación en los pliegos

Los bancos auxiliarían a las radios

En la 2° Jornada del Ciclo Anual de Radiodifusión, el director de Adjudicaciones y Licencias del Comfer, Dr. Martín Klimberg, aseguró que los radiodifusores tendrán la posibilidad de gestionar una financiación bancaria que les ayude a completar la capacidad patrimonial exigida para la entrega de los pliegos. “Si hay algún oferente al que no le alcanza el dinero, pero consigue un banco que le financie el proyecto, para nosotros es suficiente con el aval de prefactibilidad del otorgamiento de la línea de financiamiento”, especificó el funcionario. La modificación de los pliegos contempla también

Martín Klimberg, Horacio Martinelli y Alejandro Pereyra

una disminución del requisito de capacidad patrimonial. Antes se exigía que sea doble respecto a la inversión a efectuar y ahora se fijó en el 1.5 por ciento. Esto contempla, en el caso de los permisos precarios provisorios, una relación respecto al capital de trabajo ya invertido y a la inversión a efectuar. Klimberg destacó que “los aspectos personales y la capacidad patrimonial tienen calificación de admisibilidad, no se los calificará en sí mismo, se pasa o no”. Se incluyó también una tabla de evaluación que medirá las propuestas culturales de las emisoras. “Pensamos que hay que privilegiar a las radios que tengan una mayor producción local y para eso establecimos una escala de puntación que va del 1 al 100”, comentó Klimberg. En busca de combatir la clandestinidad, se crearon dos resoluciones: la N° 500 del año 2000 en la que se intenta reglamentar el sistema de denuncias y la 703, que en su artículo quinto, permite al particular damnificado tener una copia certificada de la resolución que declara la clandestinidad y acudir ante un juez federal para que le ordene a la CNC que efectúe el decomiso.

Diversidad de opiniones en la 2° jornada

El primer Ciclo Anual de Radiodifusión, con sede en la ciudad de Rosario reunió, en su segunda jornada, a representantes del Comité de Radiodifusión, abogados especialistas y propietarios de medios zonales, entre otros. El Dr. Damián Barijhoff, especialista en derecho administrativo y radiodifusión, sugirió que “si queremos salir de este problema debemos compatibilizar intereses y pensar que si estamos así, es por culpa del Estado. Entonces, debemos exigirles la mejor voluntad para que se resuelva el conflicto dejando la menor cantidad de víctimas posibles”. Y reconoció un cambio de postura en el organismo público que “otorgó las primeras licencias al interior del país y antes esas eran para Capital y para los grandes grupos”. Por su parte, el especialista en derecho administrativo y radiodifusión, Dr. Horacio Martinelli, se despachó diciendo que “si hay 5 mil cosas que resolver y se van habiendo solucionado 500, no está mal, peor es nada”. El abogado recordó que en los últimos 50 años la radiodifusión estuvo en manos de 50 familias y que conviene “no olvidarlo, porque quienes estamos acá desde hace veinte años, podemos decir cuántas y quiénes entregaron cada una de las licencias”. Y agregó: “Yo desconocía el pliego, pero dos o tres cosas me parecieron un avance importante, como la ayuda de los bancos y la valorización de la producción local. La radiodifusión tiene ahora un camino por delante”. Con una postura bastante más crítica, Carlos Cansino, Síndico Televisión Litoral, Canal 3 LT2, FM Vida y Radio Catarata, destacó: “Existe la posibilidad de monopolio de la información y opinión. La propuesta es una peligrosa política intentona de unificar ideológicamente a nuestro país a través de la concentración de medios electrónicos de comunicación”. Y especificó que “se pretende que una ciudad como Rosario, que tiene 1.200.000 habitantes, tenga 4 canales de aire, ya sean propios o por redes. Entonces, haciendo la proporción, Buenos Aires, que tiene 12 millones, debería tener 30 canales de aire y eso es imposible”. Y concluyó categóricamente con una frase de Domingo Sarmiento: “Las cosas hay que hacerlas, aunque sea mal, pero hacerlas”. “Yo no estoy de acuerdo –opinó Cansino- ya tenemos una ley mala, si vamos a hacer una, hagámosla buena”. Coincidiendo con Cansino, el presidente de la Asociación de Empresarios Radiodi-fusores de FM, Jorge Paravano, expresó: “Creo que hay una cierta distancia entre el Poder Ejecutivo elegido por el pueblo y el poder del Comité Federal de Radiodifusión, que de Comité no tiene nada, simplemente en lo político, de Federal menos, ya que a nuestra provincia no la consultan nunca, y de Radiodifusión mucho menos porque es absolutamente mercantil”.

Pereyra: “Cumplimos con las metas”

Alejandro Pereyra, director general de Asuntos Legales y Normativa del Comfer, se mostró orgulloso de haber cumplido con una de las metas propuestas al momento de la asunción de la nueva intervención. “Cuando Gustavo López asumió, se propuso crear una nueva norma, resolver los conflictos en frecuencias moduladas y volver al organismo transparente. Hoy estos son temas semi resueltos, pueden estar mal, bien, criticables o no, pero López trató de resolverlos y cumplió además con el tiempo, para no generar falsas expectativas” detalló Pereyra. Y arremetió: “Se solucionaron las más de 490 radios conflictivas entre 13 funcionarios, contra los 100 que tenía la gestión de José Aiello. Además, como nunca antes se hacía, venimos a dar la cara cada vez que nos lo piden”. Según el funcionario, “la solución de los problemas en forma global está condenada al fracaso, pero esta gestión ha intentado resolver algunos inconvenientes”. Para ejemplificar, Pereyra explicó que “se está tratando de regularizar el espectro en lo que respecta a televisión abierta, llamando a un censo interesado donde se inscribieron más de 700 personas que se comprometieron a invertir en este país. Estas son personas que van a generar puestos de trabajo y están dispuestas a gastar dinero para hacer radiodifusión, y como debemos respetarlas, convocamos al Plan Nacional de Televisión”, concluyó.

Por primera vez el Comfer atiende a los usuarios

Por primera vez, desde su creación, el Comité Federal de Radiodifusión cuenta con una dirección de Atención al Usuario. El objetivo perseguido era abrir un área que está dedicada a receptar y canalizar las opiniones de los ciudadanos, las denuncias y los reclamos. “El Comfer produjo un cambio hacia los radiodifusores y hacia la gente, ésta es una gestión de puertas abiertas”, declaró Pablo Santos, director nacional de Supervisión y Evaluación del Comfer. Santos contó además que el organismo premiará a las mejores producciones de radio y televisión independientes y creará el

Carlos Cansino, Damián Barijhoff, Pablo Santos y Fernando Oyuela

Centro Nacional de Televisión en el marco del Instituto Superior de Enseñanza Radiofónica. El objetivo es estimular a nuevos realizadores a los que se los reconocerá cada año, por la mejor dirección, guión, producción y otros rubros del medio. Siguiendo con el plan de modificaciones, Santos mencionó que “se está haciendo una reestructuración y rejerarquización en el ISER, fundamentalmente a partir del nuevo Plan de Estudios que ha entrado en vigencia”.