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Entrevista a Enrique Albistur Lanzan el Sistema Nacional de Industrias Culturales En la primera etapa se realizará el censo que involucrará a todo el país para determinar no solo las prácticas culturales de los distintos sectores sociales sino también sus expectativas y demandas. El trabajo de campo estará a cargo del Indec y será supervisado por universidades nacionales. El objetivo es realizar en una primera etapa una suerte de “ megacenso” cultural que involucrará a la población de todo el país. A través de consultas impulsadas por equipos del Indec, el Sistema Nacional de Consumos Culturales permitirá conocer periódicamente, no sólo las prácticas efectivas de los diversos sectores sociales sino también las expectativas y demandas que surjan de la opinión de la gente. Para organizar la medición, se establecieron distintos parámetros. Una de ellas, “Consumos culturales propiamente dichos”, abarca música y lectura -compra de libros, lecturas y consultas en bibliotecas, CD comprados y escuchados-, usos del tiempo libre -cine, teatro, conciertos, recitales, videos en el hogar, deportes y recreación, actividades educativas no formales -actividades prácticas y estéticas, idiomas, arte y literatura- y usos de la computadora -posesión de PC en el hogar, Internet-, entre otros. Por otra parte, los “Consumos mediáticos” incluyen la exposición a medios -posesión y exposición de televisión abierta y por cable, radio, gráfica- y el estudio general de medios y cultura. Por último, “Perspectiva económica” abarcará la oferta nacional de bienes y servicios culturales y el consumo de los hogares, entre otros. El método de medición estará dividido por regiones, grupos de edad, sexo y nivel socio-económico. Se realizará de manera sistemática aplicando estudios cuantitativos y cualitativos. El plan de investigación, el cronograma y los resultados obtenidos serán supervisados por una comisión integrada por directores de carreras de comunicación social de las universidades nacionales y asistida técnicamente por el INDEC. -¿Como surgió la necesidad de implementar un Sistema Nacional de Medición de Consumos Culturales? -En la
Secretaría de Medios se venía hablando acerca de todo lo
que tiene que ver con la cultura, y específicamente, sobre la cuestión
de los medios y una realidad que nos encuenta con que no hay datos estadísticos
sobre consumos culturales, en un país donde existe mucha actividad
cultural. -Qué piensa de la aparición y los contenidos de la apodada “televisión basura”, teniendo en cuenta que las grandes corporaciones de medios se encargan de señalar que se trabaja sobre lo que la gente quiere ver... -Creo que es una discusión sin base de estadísticas, sin datos. Si uno se detiene a analizar algunos programas que tienen mucho rating, puede observar que no tienen los tres elementos básicos que necesitan los medios de comunicación, que son: informar, formar y entretener. Pero bueno, es un debate, tampoco uno porque esté sentado acá es el dueño de la verdad. En función de políticas de estado hay que trabajar con algunas cosas que a lo mejor son más lentas, más estratégicas. -¿El sector privado mostró su disconformidad o sintió algún resquemor al enterarse que el Gobierno pondría en marcha este nuevo sistema? -En realidad,
opinan sin mucho conocimiento, estamos en un país que tenemos miedo
y hay que perderlo. Uno lo que hace desde esta función es por lo
menos hacer las cosas bien y poner en práctica lo que siempre discutió
desde el sector privado. -¿Cómo debería ser el Sistema Público de Medios? -Ese es otro debate... cómo tienen que ser los medios públicos en este país. Quizá no es ni como lo pienso yo ni como lo piensan los canales privados, por ahí tiene que ser marginado a cierto tipo de programación. Pero si me preguntás, creo que el canal público tiene que tener ciertos contenidos que no transmiten los canales privados. El Sistema Público de Medios debe ser el reflejo de un país que hoy se encuentra con un 50% de personas bajo la línea de pobreza. Ese es el público objetivo de un canal estatal, que llega a todo el país, para darle programación a esa gente que no tiene poder adquisitivo para recreación u otras cosas. Los canales privados apuntan más a los nichos de consumo, o sea que ni siquiera hay competencia, sino cierta complementariedad, de alguna manera. -Teniendo en cuenta que Canal 7 no llega a todo el país ¿Qué medida adoptará el Gobierno? -Hay otras prioridades, pero está la decisión política del Presidente, que el canal estatal exista, porque en otras épocas se tomó el camino contrario, y como no hay políticas de estado, en otros rubros nos pasó lo que nos pasó en el país. Venimos de la locura extrema de privatizar todo y no queremos cometer ahora la locura de irnos al extremo, sino ver qué cosas tiene que hacer el Estado, una de ellas es crear un Sistema de Medición de Consumo Cultural, para saber qué es lo que la gente quiere realmente. Además, de ponerlo al servicio de los que hacen TV y usarlo para programar Canal 7 y Radio Nacional. Uno de los desafíos es que la señal estatal vuelva a transmitir en las zonas que actualmente no llega. -En algún momento se propuso que las repetidoras de Canal 7 sean administradas por el sector privado... -Es una decisión que tenemos que debatir y hay que instalar en la sociedad. Es cierto que está la decisión política de que exista un canal público que tenga una programación federal y es lógico que tiene que llegar a todo el país. Si el país sigue en este camino, hasta vamos a poder reequipar Canal 7 y Radio Nacional, porque hay una decisión política de que exista. Por supuesto, que no será de un día para otro pero si quiero remarcar que en algunos lugares del interior tanto la radio como el canal estatal, son muy importantes. Nosotros como porteños, por ahí no vemos la importancia que tienen. -Ud. viene del sector privado y por ende conoce los riesgos de la inversión, ¿Qué diferencia encuentra en la función pública? -Bueno,
es totalmente diferente porque uno está administrando dinero del
Estado, que en definitiva es el dinero de la gente. Nosotros somos personas
comunes, en cargos importantes. El Estado, respecto al sector privado,
tiene que darle elementos para que invierta, por eso digo que investigar
y tener los datos sobre ciertas cosas también ayuda a la acción
empresaria. Este sistema será un instrumento muy importante para
tomar decisiones. Si tengo que definir a este país digo que es
el país de la improvisación, por eso estamos como estamos.
Los cines tienen iglesias adentro o son de grandes cadenas internacionales,
entonces qué sucede, cuando viene como dicen en la industria del
cine los “tanques”, tomemos como ejemplo la película
“La pasión de Cristo” o “El Señor de los
Anillos”, perdemos la posibilidad de exponer bien las películas
nacionales, en un momento donde la industria local también anda
muy bien. ¿Argentina está en condiciones de hacer algo similar? -Si y
de hecho, lo vamos a consultar. Así como yo no me quiero meter
en lo que hace Ibope, ellos tienen la puerta abierta con el sistema que
vamos a tener nosotros. Acá no hay nada que ocultar, el temor surge
de una mentalidad de confabulación que existe de otra época,
esto tiene que ser transparente y debe servirle a la industria y al Estado
para programar sus propios medios. Realmente no entiendo cuál es
el temor de ciertos sectores, no tiene sustancia y hablando con los personajes
tampoco me han dado elementos. -¿Cuales son las prioridades? -En líneas
generales las prioridades son tratar de cubrir el territorio y equipar
Canal 7 y Radio Nacional. En el caso del canal estamos hablando de tecnologías
del ‘76 . En radio tenemos dos tecnologías que reemplazar,
es más, es increíble como siguen funcionando. -Este año, ¿hay nueva ley de Radiodifusión? -Si este
año sale o no, depende de muchas cosas. Yo creo que necesitamos
una ley de Radiodifusión, que tiene que tener cierto nivel de consenso
con la sociedad, entre los cuales están sin duda los dueños
de los medios. Este es uno de los desafíos del Gobierno, referente
a los medios. Particularmente, creo que va a salir mucho más rápido
de lo que uno se imagina. Objetivos del Sistema Nacional de Consumos Culturales Conocer las prácticas y consumos culturales de los distintos segmentos poblacionales de nuestro país tomando en cuenta las diferentes realidades regionales que permitan el desarrollo de políticas públicas con un sentido federal. Generar una herramienta que le permita, tanto al sector público como al sector privado, mejorar las ofertas que se realizan a los distintos segmentos poblacionales. Incluir
la medición de las actividades culturales desde una perspectiva
económica a fin de potenciar el desarrollo de la industria cultural
en nuestro país. |
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